Una ecuatoriana, varios mexicanos, una venezolana y un boliviano nos sentamos un día a discutir en tierras lejanas sobre un tema cotidiano pero trascendental para el inmaginario latinoamericano: Pepito!.
Quién no ha escuchado sobre las aventuras de Pepito, su inocencia, su picardía y su forma de ver la vida tan " chusca". Sólo él sabe como hacer temblar a cualquier profesora con sus preguntas o a sus papás con sus temibles respuestas a la vida.
Pepito, será gordo? será flaco? rubio o morochito? Que toma Pepito para estar tan joven siempre y no crecer nunca? y la pregunta del millón: donde nació!?.
Según los amigos mexicanos Pepito de ley era Chilango ( del DF) y su picardía se debía a tener que aguantar todos los días el pinche camión que se demora en todos los trancones de la ciudad y las tortillas ahogadas que muchas veces se las debió comer muy picantes y por eso habla demás.
Por mi parte, creo que si pepito fuese ecuatoriano sería seguro guayaquileño o manabita porque sólo ahí he conocido gente que se pone 11 y que anda a mil por hora por sobre cualquier expectativa que pueda un ser tradicional tener y que de no entenderlo, por supuesto te come vivo.
Analizando otras posibilidades dudamos mucho que Pepito sea Boliviano, son muy buena gente son los amigos de la tierra de Evo como para contar los chistes de pepito, mucha chispa pero no de la onda del Pepito latinoamericano.
Si fuera peruano, seguro sus chistes terminarían en seguro pe! ( descartado..)
Si Pepito fuese un che argentino sus chistes serían más ácidos y entendibles sólo para un sector social, pero en cambio si Pepito fuera Brasileño, quizás deberíamos aprender a hablar portugués y bailar zamba.
Ya sé...Pepito es venezolano!? por eso estará con nosotros Hasta la Victoria siempre o hasta que aparezca otro héroe que nos permita unirnos más en hermandad.
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